La directora del Laboratorio de Diseño Creativo, Andrea Bonardd, participó en el Encuentro de Formación del Museo de Arte Moderno Chiloé donde expuso el trabajo que ejecuta en el norte del país.

En una jornada llena de intercambio de experiencias y aprendizaje mutuo, Andrea Bonardd, directora del Laboratorio de Diseño Comunitario Barquito de Papel, participó en el Encuentro de Formación del Museo de Arte Moderno (MAM) Chiloé donde compartió la valiosa labor que realiza la organización en el trabajo inclusivo con un grupo de jóvenes con síndrome de Down de la Región de Tarapacá.

Durante su intervención en el evento denominado “Prácticas Expansivas”, la fundadora de Barquito de Papel compartió el origen de este laboratorio, un espacio que nació al identificar una grave carencia en diversas regiones, especialmente en Tarapacá: los jóvenes con discapacidad intelectual que terminan su educación especial a los 26 años no tienen acceso a ningún espacio, ni público ni privado, que continúe apoyando su desarrollo.

“El Estado protege a estas personas hasta esa edad y luego los abandona, por ende, no existía nada que pudiese seguir potenciando ni promoviendo ningún tipo de habilidad en estos jóvenes. Es a partir de esta esa carencia que nace Barquito de Papel para poder incorporarlos en este espacio de creación, de formación, de ocupación y por sobre todo de participación social”, detalló.

METODOLOGÍA PIONERA

En el evento desarrollado en la comuna de Castro, Bonardd compartió la metodología única de Barquito de Papel, que se distingue por su enfoque colaborativo, articulando tres sectores clave. Por un lado, están las y los artistas: diez jóvenes de entre 26 y 42 años con diversidad funcional intelectual; por otro, el equipo de profesionales, compuesto por cinco mujeres de diversas disciplinas como el diseño, la educación y la creación artística; y, finalmente, las madres de los jóvenes, quienes juegan un rol fundamental en el proceso. Esta integración de sectores permite una experiencia enriquecedora y multifacética para todos los involucrados.

“Estos tres sectores nos permiten articular y promover nuestro modelo, donde potenciamos el emprendimiento protegido, además de todos los procesos creativos y de formación en oficios. Es una metodología innovadora que ha tenido excelentes resultados durante estos cinco años que hemos ido implementándola. No obstante, nuestro foco hoy es poder seguir creciendo y buscar la manera de darle continuidad a este trabajo, y de poder sostenernos en el tiempo”, puntualizó.

En ese sentido, la directora de Barquito de Papel destacó durante su exposición que hoy la organización es una empresa formalmente constituida, con marca registrada. A través de su página web y su participación en ferias, donde se presentan con su carrito de ventas, dan a conocer el valioso trabajo colaborativo entre los jóvenes con síndrome de Down y el equipo de profesionales, promoviendo su creatividad y emprendimiento en espacios públicos.

Sobre el encuentro, la líder de este laboratorio de diseño creativo comentó que “ha sido sumamente enriquecedor ver cómo, desde las regiones, están surgiendo iniciativas tan valiosas. Lo que más me gustó es que este encuentro no haya sido en Santiago, sino en la otra punta del país. Nos hemos reunido aquí para compartir nuestras experiencias y, a través de ello, construir una red que impulse el arte inclusivo, que es precisamente lo que queremos seguir promoviendo”.

VALORAN LA EXPOSICIÓN

Por su parte, Catalina Pávez, del MAM Chiloé, valoró la exposición realizada por Bonardd ya que permitió conocer la experiencia que ha significado Barquito de Papel en una comunidad de Chile territorialmente opuesta como también su metodología la cual consideró que es muy valiosa sobre todo para aquellas organizaciones que recién se están iniciando en este tipo de proyectos.

“Poder conocer este proyecto de primera fuente y entender cómo de a poco se ha ido transformando en una propia metodología de trabajo permite tener una mirada mucho más global y también apoyar el inicio de otras propuestas u otros proyectos con intereses similares. Ha sido de gran impacto no solamente la charla en sí misma de Andrea y su participación en el encuentro, sino también el poder compartir con ella durante estos días, conocer como de manera más íntima el proceso de trabajo, lo que conlleva la constancia dentro del diseño e implementación de proyectos culturales e inclusivos”, finalizó.

EL EVENTO

El Encuentro de Formación del MAM Chiloé fue un espacio que permitió conocer, intercambiar y reflexionar entre personas, organizaciones y proyectos que han desarrollado sus prácticas en torno a la accesibilidad e inclusión por medio del arte, la mediación y formación artística.

Fue así que también contó con la participación de Sofia Montiel y María José Fuentes, integrantes de la agrupación “Mis manos son mi voz” (Castro -Chile); Llaramby Delgado y Josefa Ruiz, del taller “Tormenta”; Margarita León, profesional de educación en los Museos de Arte y Numismática de los Museos del Banco de la República (Bogotá-Colombia); así como de Julie Plasencia, enlace artístico y coordinadora de desarrollo profesional en el Centro Creative Growth en Oakland (California-EEUU).

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