Un preocupante panorama financiero en la educación municipal fue expuesto en la comisión de Educación del Senado por la directiva de la Asociación de Municipalidades de La Araucanía (AMRA). La presidenta de la entidad y alcaldesa de Pitrufquén, Jacqueline Romero, advirtió que la deuda educación municipal La Araucanía alcanza niveles críticos y que, de no contar con un apoyo decidido del Estado, la calidad del servicio educacional podría verse aún más afectada en el proceso de traspaso a los Servicios Locales de Educación Pública (SLEP).
Deuda educación municipal La Araucanía: una crisis estructural
Durante la sesión en la Cámara Alta, Romero estuvo acompañada por el vicepresidente de la AMRA y alcalde de Padre Las Casas, Mario González; el alcalde de Ercilla, Luis Orellana; y la alcaldesa de Vilcún, Katherine Migueles, quien participó de manera remota.
Los jefes comunales detallaron que la deuda educación municipal La Araucanía se ha incrementado debido a múltiples factores: la baja en matrículas escolares, la disminución de la asistencia a clases que afecta directamente a las subvenciones, los costos asociados a transporte escolar y el alto número de licencias médicas dentro del sistema.
Romero fue enfática en señalar que los municipios enfrentan un desfinanciamiento sostenido, mientras se aproxima el traspaso a los SLEP:
“Las deudas que tenemos en los municipios a nivel de Educación son altísimas. Necesitamos un mayor apoyo del Estado para asegurar una educación de calidad. Hoy contamos con menos matrículas y baja asistencia escolar, lo que afecta directamente las subvenciones. Además, en temas como transporte escolar hemos visto trabas para asegurar un servicio que es primordial, especialmente en zonas rurales”.
Municipios de La Araucanía cuestionan traspaso a los SLEP
El alcalde de Padre Las Casas, Mario González, advirtió que los municipios han debido absorber costos que no son cubiertos por la subvención estatal, lo que ha llevado a un escenario crítico:
“Estamos desfinanciados porque el valor de la subvención escolar no se ha incrementado. Solo se ajusta a matrículas y no a asistencia. A eso debemos sumar la alta cantidad de licencias médicas, que representan un gasto adicional para los municipios”.
En tanto, el alcalde de Ercilla, Luis Orellana, expresó dudas sobre el impacto real del traspaso al SLEP:
“No sé si el SLEP va a mejorar las deficiencias de infraestructura que tiene mi comuna, porque ni siquiera tienen considerado ese ítem”.
Estas declaraciones reflejan una falta de confianza en el modelo de traspaso educativo, que debería comenzar a implementarse en los próximos meses en varias comunas de la región.
AMRA propone soluciones ante la deuda educación municipal La Araucanía
Ante este escenario, la directiva de la AMRA presentó una serie de propuestas para enfrentar la crisis financiera de la educación municipal. El objetivo es abrir un espacio de diálogo con el Estado y el Parlamento para diseñar soluciones que permitan asegurar la sostenibilidad del sistema y evitar que las comunidades educativas sean las principales perjudicadas.
La exposición en el Senado buscó visibilizar que los municipios de La Araucanía, además de enfrentar altos niveles de deuda, deben lidiar con problemas estructurales de infraestructura, baja asistencia y falta de recursos para transporte escolar en zonas rurales.
Romero recalcó que el compromiso de la AMRA es avanzar en una educación pública de calidad que no dependa exclusivamente de la capacidad financiera de cada municipio:
“Queremos que este tema se aborde con seriedad y con apoyo real del Estado, porque la deuda educación municipal La Araucanía no es solo un problema de números: afecta directamente a los estudiantes, a los docentes y a las familias”.
Un llamado urgente al Estado y al Parlamento
Con esta intervención, la Asociación de Municipalidades de La Araucanía busca que la crisis educativa se instale en la agenda nacional y que el Estado asuma un rol más activo en el financiamiento de la educación pública.
La deuda educación municipal La Araucanía no solo compromete la gestión de los municipios, sino que también condiciona el futuro de miles de estudiantes de la región, especialmente en contextos rurales donde las brechas son más profundas.
La AMRA insiste en que sin recursos frescos y medidas concretas, el traspaso a los SLEP podría transformarse en una carga aún más pesada para las comunas, en lugar de ser la solución esperada.
