Niños, niñas y adolescentes de tres regiones compartieron experiencias y participaron en dinámicas deportivas que fortalecen la integración, el autocuidado y la participación en políticas de protección.


Deporte y participación como protagonistas

Con el deporte como eje central, el Servicio Nacional de Protección Especializada a la Niñez y Adolescencia de La Araucanía realizó en el Polideportivo de Labranza, comuna de Temuco, el 2° Encuentro Regional de Participación. La actividad reunió a los Consejos asesores de niños, niñas y adolescentes de La Araucanía, Aysén y Los Ríos, promoviendo espacios de diálogo, reflexión y colaboración.

Durante más de 7 horas, los participantes compartieron experiencias y reflexionaron sobre la importancia de la actividad física en sus vidas, destacando cómo esta influye en su bienestar físico, emocional y social. La jornada buscó fortalecer la integración social y el desarrollo de habilidades para la vida, usando el deporte como herramienta de autocuidado y cohesión.


Voces de la niñez y compromiso institucional

Ximena Oñate, directora regional del Servicio de Protección, resaltó la relevancia del encuentro:

“Este es un espacio de encuentro y participación entre tres regiones con un objetivo común: convertir este día en una experiencia deportiva. Aquí, ninguna decisión se toma sin considerar la opinión de los niños y niñas; este es un ejercicio activo de participación”.

Por su parte, la Seremi de Desarrollo Social y Familia, Mariela Huillipan, destacó que estas instancias permiten avanzar en políticas públicas inclusivas:

“Estamos recogiendo opiniones porque nuestro objetivo es dar real importancia a las voces de la niñez, especialmente de quienes hoy están vinculados al Servicio de Protección Especializada”.


Dinámicas, integración y aprendizaje

Las actividades incluyeron dinámicas participativas y espacios de conversación, promoviendo el trabajo conjunto entre los Consejos asesores de las tres regiones. Estas instancias consolidan una plataforma de participación efectiva, donde las voces de los niños, niñas y adolescentes son escuchadas y consideradas en la toma de decisiones y en el diseño de políticas de protección.

La jornada también permitió fortalecer el sentido de comunidad y pertenencia, mostrando que la integración y el autocuidado pueden combinarse con el aprendizaje de valores, habilidades sociales y la construcción de relaciones basadas en el respeto y la colaboración.

Con este tipo de encuentros, el Servicio Nacional de Protección Especializada a la Niñez y Adolescencia busca no solo fomentar la actividad física, sino también empoderar a las nuevas generaciones, garantizando que sus opiniones sean parte activa de los procesos de desarrollo y protección en cada región.

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