La ex presidenta de la Convención Constitucional no logró captar apoyo significativo en las comunas de la región, quedando fuera de la disputa por uno de los cinco escaños disponibles. Su bajo desempeño abre un debate sobre la desconexión entre el progresismo y el electorado mapuche y rural del sur del país.
Un resultado inesperado en un territorio clave para el mundo indígena
La jornada electoral de este domingo dejó uno de los resultados más llamativos en la Región de La Araucanía: la contundente derrota de Elisa Loncon, ex presidenta de la Convención Constitucional, quien no logró consolidar un respaldo importante en una zona que históricamente ha jugado un rol clave en la discusión sobre pueblos originarios.
A pesar de ser una figura reconocida a nivel nacional y de su vínculo con el mundo mapuche, Loncon quedó ampliamente por detrás de los principales candidatos en la región, obteniendo un porcentaje de apoyo significativamente menor al proyectado por su comando. Las primeras tendencias mostraron que su candidatura no logró instalarse entre las preferencias de los votantes, incluso en comunas donde en ciclos anteriores existió mayor adhesión a liderazgos indígenas.
Con el 100% de las mesas escrutadas, la académica mapuche e independiente por el Partido Comunista obtuvo 39.221 votos, equivalentes al 6% del total de sufragios válidamente emitidos, quedando fuera de los cinco cupos que reparte la circunscripción.
Polarización, desgaste y dispersión oficialista marcaron el escenario
El resultado revela la complejidad del escenario electoral en una región marcada por la polarización política y por altos niveles de participación. En total, se emitieron 778.034 votos, de los cuales 654.015 fueron válidos. La lista Unidad por Chile sumó el 27,86% del total, siendo el pacto más votado junto a Cambio por Chile (28,72%) y Chile Grande y Unido (27,32%).
En ese contexto, la dispersión del voto oficialista afectó el desempeño individual de sus candidatos. Francisco Huenchumilla (PDC) lideró entre los postulantes de la lista con 56.194 votos (8,59%), seguido muy de cerca por Ricardo Celis (PPD) con 40.197 (6,15%), mientras que Loncon se posicionó en tercer lugar dentro de su pacto.
Por contraste, los grandes ganadores fueron Rodolfo Carter (IND-Republicanos), quien lideró a nivel regional con 94.647 votos (14,47%), y Vanessa Kaiser (PNL), con 58.195 sufragios (8,90%). Henry Leal (UDI), Miguel Becker (RN) y Jorge Rathgeb (RN) completaron el grupo de electos, confirmando el dominio de la derecha y ultraderecha en la región.
El caso de Loncon evidencia las tensiones que atraviesa el progresismo en La Araucanía, territorio clave para el debate sobre plurinacionalidad, seguridad y desarrollo rural. Pese a su reconocimiento como figura pública y académica, su candidatura no logró traducirse en respaldo electoral suficiente en una región con fuerte presencia de candidaturas conservadoras y un electorado que ha virado hacia opciones de derecha dura en los últimos años.
La elección deja en evidencia el desafío pendiente para el mundo progresista de reconectar con el sur del país, y especialmente con las zonas rurales y mapuche del Wallmapu, donde figuras como Loncon no lograron canalizar el voto identitario ni el respaldo necesario para obtener representación parlamentaria.
Analistas coinciden en que su bajo desempeño responde tanto a la fuerte polarización entre las candidaturas mejor posicionadas como al desgaste de la figura de la exconvencional tras el fallido proceso constitucional, un factor que siguió pesando en los electores de La Araucanía. A ello se suma la presencia de otros postulantes con discursos más alineados con las preocupaciones de seguridad y desarrollo local, temas prioritarios para la región.
El nombre de Loncon se suma a otras figuras nacionales cuya performance electoral no les permitió llegar al Congreso a pesar de su notoriedad pública, como Rodrigo Rettig, Jorge Sharp, Sabas Chahuán, Ínti Salamanca, Claudia Hasbún, Luis Mariano Rendón, Pablo Maltés, entre otros.
