Luego de que en la última sesión del Concejo Municipal de Lautaro, el Concejal Gastón Muñoz dejó en evidencia al alcalde Ricardo Jaramillo, «mentirle» a los vecinos de Santa Ana, con el proyecto de pavimentación participativa, que no se presentó y se transó en una discusión donde evidencio la incoherencia de información del secplan Eduardo Becker, quien llegó con la actual administración.
En concreto, el equipo municipal aseguró que el Proyecto tendría un financiamiento por el llamado 34, que significa que se revisaría en 2024, pero realmente estará bajo el llamado 35, los cuales son revisados el 2025, lo que retrasaría su implementación hasta el 2026.
Además, desde la SECPLAN, aseguraron que se encontraban dentro del Plazo para presentar los Planos de Arquitectura e Ingeniería, siendo que éste finalizó el pasado 28 de junio, pero acá el concejal fue categórico y lo increpó diciendo «no le mienta a la gente».
Ese mismo día por la madrugada, mediante redes sociales y en un posteo en una publicación del Instagram del Muñoz, Jaramillo explotó, acusando que el concejal Muñoz “se le insinuaba a mi novia y después como me atacó sabiendo que ella estaba embarazada de mi hijo que llega en noviembre”.
“Me da mucha pena que Gastón Muñoz después de todo lo que le apoyé en sus solicitudes, no es capaz de conversa las cosas antes como iba a mi casa a decírmelas…”, finalizó visiblemente afectado el edil. mensaje que horas más tarde borraría, pero quedó la evidencia de este.
Sin embargo, este fuego cruzado entre estas dos autoridades lautarinas, quienes buscan ser alcalde, incluyó un tercer involucrado, el nuevo director de la Secretaría de Planificación del municipio, Eduardo Becker, quien comenzó a expresar por las plataformas digitales.
Becker posteó en las redes sociales de Muñoz que “no tienes idea y estás desesperado, no conoce ni a la directora del MINVU”.
El nuevo SECPLAN finalizó asegurando que le haría una presentación con “peras y manzanas”.
Cabe destacar que por redes sociales, las y los vecinos de Lautaro, le exigen a sus autoridades más seriedad y menos pelea por redes sociales, poniendo en el centro el interés de la comunidad lautarina. Sin dejar de lado que les parece grave las acusaciones que posteó el alcalde Jaramillo, donde aseguran que a funcionarios también les ha llamado la atención y presionado por problemas personales con su polola.