En un esfuerzo conjunto por preservar la biodiversidad y proteger a las especies nativas, la Corporación Nacional Forestal (CONAF) y el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) llevaron a cabo la liberación de cuatro ejemplares de monito del monte (Dromiciops gliroides) en el Monumento Natural Cerro Ñielol, ubicado en la región de La Araucanía.
Estos pequeños marsupiales, considerados verdaderas joyas de la fauna chilena, cumplen un rol fundamental en el ecosistema boscoso al actuar como dispersores de semillas y reguladores de insectos. Este marsupial, además, se encuentra en una situación de vulnerabilidad debido a la pérdida de su hábitat natural.
La actividad contó con la presencia de autoridades y especialistas. Claudio Correa, administrador del Monumento Natural Cerro Ñielol, destacó la importancia del lugar elegido para la liberación, «este monumento es hábitat natural de este tipo de marsupiales. Es uno de los últimos relictos donde el monito del monte puede crecer en seguridad y completar todo su ciclo ecológico. Hemos identificado áreas con refugio y alimento suficiente, además de estar alejadas de depredadores como el peuquito. Este trabajo cuidadoso asegura las mejores condiciones para su supervivencia.»
Los ejemplares liberados pasaron previamente por un proceso de cuidado y revisión veterinaria bajo la supervisión del SAG. Francisco Castillo, jefe de la Oficina SAG Temuco, enfatizó el compromiso del organismo en la protección de la fauna nativa, «cuando recibimos estos monitos del monte, realizamos un protocolo de evaluación para asegurar que estén en condiciones de regresar a su hábitat. Cerro Ñielol es un lugar protegido, ideal para que puedan reproducirse y desarrollarse de forma segura. Hacemos un llamado a la comunidad a que, si encuentran un ejemplar, avisen de inmediato al SAG para garantizar su correcto manejo.»
Por su parte, María Teresa Huentequeo, directora regional de CONAF, destacó el valor ecológico de los monitos del monte para el equilibrio del ecosistema, «estos marsupiales son clave para enriquecer la biodiversidad del Cerro Ñielol. Son reguladores de plagas y contribuyen al equilibrio de este bosque nativo. Esta liberación es una muestra del trabajo colaborativo que realizamos con el SAG para preservar nuestro patrimonio natural.»
La liberación refuerza la importancia de las áreas protegidas como refugios de biodiversidad y el compromiso de CONAF y SAG en la conservación de especies amenazadas. Además, se hace un llamado a la comunidad a colaborar evitando la manipulación de estos animales y notificando a las autoridades en caso de encontrarlos.